Crisálida.
Sentimiento sustanciado de emociones, plasmadas en palabras, dichas en un susurro que brotan del fondo de mi Alma.
 
          
        
          
        
 
 En blanco y negro 
De formas alargadas, 
redondas, 
elípticas. 
En blanco y negro 
Fueron escritas las palabras 
que conmovieron Mi alma. 
En blanco y negro 
Que a ojos vista 
se vistieron de esmeralda. 
Inspiraron ternura, 
y las lágrimas aparecieron 
sin ser invitadas. 
En blanco y negro 
Estaban escritas las palabras 
que iluminó mi mirada. 
 
  María Verónica 
 
 
 
El encuentro.
Es esa boca que quieres besar 
Son esos brazos 
que deseas  te rodeen
y aprisionen 
sentir las caricias de sus manos
 al ras de la piel 
 El deseo. 
 El encuentro.
 Es la boca que se seca 
la voz aún más ronca.
 El estómago que se contrae, 
 El corazón que se alborota,
 se detiene por un instante 
 y luego… 
 Dispara,
 galopa 
 y  se relaja.
 Es el tiempo 
que imploras  se detenga
 más  luego 
 el miedo a que termine. 
 El  encuentro, 
el deseo, 
la pasión 
el amor 
la ternura... 
 Son los cuerpos que se reconocen, 
 viejas pieles, 
 amores que perduran 
 y nunca se olvidaron.
 María Verónica 
 
 
 
Voy a preservar tus sombras
del naufragio.
Voy a atrapar tus ojos
calcinados de nadas.
Voy a arder 
y devorar tus llamas
cuando mis tobillos trepen
hasta tu espalda
y arranquen sueños cansados
de este pedazo de cielo
que es tu cama... 
 
Te invitaría a hundirte en mis ojos,
 llenos de cenizas de los recuerdos pasados,
 con un nuevo mirar de nuestras almas, 
sonreír en las mañanas 
servirte este amanecer 
y darte más madrugadas. 
 
Desleír
en tu vida,
como en la mía, 
 
los instantes aquellos 
que nos marcaran por siempre 
con ese sabor agridulce del recuerdo 
 
De un amor que fue 
 
y no era su momento.
 
                                            Maria Veronica Flores Hilde